Ahora que refresca te apetece encontrar un restaurante íntimo y original… ¡aquí lo tienes!;  no por su diseño interior, que también, si no por su ubicación bajo tierra. En pleno centro de Madrid, al ladito mismo de la Estación de Atocha, das un paseo de 10 minutos hasta llegar al Restaurante

Bodega de Los Secretos

Todo el restaurante está enterrado, allí donde los monjes en el siglo XVII hacían vino y ampliaron aquella Bodega; años de secretos e historia  que ahora puedes conocer, lo puedes respirar al bajar por la escalera de hierro y hormigón hasta la cava. En un ambiente íntimo y muy, muy especial, piensas que estás solo en una de las bóvedas de los pasillos. Quizá puedas pedir la que alberga el comienzo de un estrecho pasaje que comunica con el antiguo Hospital General, ahora Museo Reina Sofía.

El diseño interior respeta la historia, y queda relegado a un segundo plano para realzar la belleza de las paredes y bóvedas de ladrillo, las instalaciones empotradas en el suelo, tan solo un aparador, un espejo y algún cuadro que acompañan y unas actuales lámparas para llenar el vacío de la galería principal.

Por cierto!! una carta variada y original con muy buen tartar!